Cuando las notas de sudor golpeando tus mejillas
resuenen con dolor mientras me sonries alelada
estaré ahí para ti.
Cuando la paranoia te carcoma las entrañas
y la desconfianza te haga ver alucinaciones
estaré ahi para ti.
Si me vez a lo lejos, riendome de tu condición
me gritaras fuerte, seré sordo, pues no me puedes hablar
te prohibo hablar, ya no estaré para ti.
Si piensas que seguire ahí para ti siempre
si piensas que tu engaño me engaño
o tu maldición me afectó
te degollare como nunca antes lo habian hecho.
Comere tu carne, bebere tu sangre
sin embargo, ya no sentiré nada, pues nunca te quise
nunca me dejaste hacerlo.
Ahora es tarde.
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